La Secretaría General de UGT me está dando la oportunidad de recorrer España y ver de primera mano y desde una perspectiva diferente los problemas, retos y desafíos, y determinación de los trabajadores y trabajadoras. Ver la realidad desde lo macro a lo micro y ver los efectos de la política en todos sus términos, desde lo estatal hasta lo local, en el día a día de esas personas. Mi reciente visita a Soria ha coincidido con la presentación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) y es ejemplo para el ilustrar esta reflexión.
Es muy revelador ver la enorme importancia que tiene el acuerdo alcanzado con el ministerio de hacienda, que afecta a casi 350.000 trabajadores y rectifica la política de recursos humanos del gobierno y pone orden a la caótica situación provocada por años de recortes. Una enorme importancia para los ciudadanos de Soria, donde el empleo público tiene un gran peso sobre el conjunto de la economía.
Lo mismo ocurre, pero en sentido contrario, al ver como una reducción del 20% en las inversiones en infraestructuras en los PGE puede ser absolutamente demoledor en una provincia como Soria, con enormes carencias en esa materia, con problemas de despoblación y envejecimiento de sus habitantes. El papel de las infraestructuras son determinantes de la vertebración de un país, y España tiene una deuda con las gentes del interior. Los políticos tienen que dar la oportunidad a que la gente, si así lo desea, puede vivir y desarrollarse en el lugar que nació, y para ello tiene que promover sistemas de infraestructuras y transportes, y en concreto, que aseguren la movilidad y la conexión, lo que, junto a inversiones en nuevas tecnologías y digitalización, ayudarían a dar una nueva dimensión a la España interior, a promover el equilibrio territorial. Es absurdo hablar de Smart Cities si no se hace una política solidaria para el conjunto del Estado. La oposición entre grandes y pequeñas ciudades, entre el exterior y el interior, no beneficia a nadie y frente a la despoblación o envejecimiento podemos hablar de superpoblación y los problemas que se derivan, como el suministro de agua.
Y siguiendo con el ejemplo de los PGE, curiosamente lejos de lo que podría pensarse desde la lejanía y cierta ignorancia, el peso de la industria en Soria es muy importante para PIB. pero el esfuerzo y la iniciativa por parte de sus gentes es insuficiente y sin impulso político y público hacia un decidido cambio de modelo productivo, indispensable para convertir a la industria en el motor de la economía y la generación de empleo con derechos que necesita este país.
Como he dicho antes, con este tipo de viajes puedo ver las cosas con otra perspectiva, relativizar otras muchas y desterrar apriorismos, como ha ocurrido sobre mi opinión acerca del proyecto instalación de una vaquería en esas tierras, y que antes de este viaje, mi primera impresión no era positiva. Pero tras hablar con mis compañeros, ciudadanos, políticos, etc., creo que es una oportunidad que hay que desarrollar de manera sostenible económica y ambientalmente.
Y me ha permitido ver el absurdo de que no estén dando uso a una instalación penitenciaria nueva y acabada, a la que se destinan recursos de seguridad y vigilancia, pero que sigue sin ponerse en funcionamiento y no está el siendo utilizada, mientras en la vieja prisión que hay en la ciudad, los presos siguen viviendo hacinados y sin los recursos de instalaciones adecuadas para promover su reinserción social, a la par que los funcionarios de prisiones no pueden desarrollar su trabajo en las condiciones laborales necesarias.
He podido comprobar una vez más que la Unión General de Trabajadores tienen los delegados, afiliados, y cuatro sindicales absolutamente implicados en intentar resolver los problemas del conjunto de los trabajadores y trabajadoras, y de sus conciudadanos y conciudadanas, a la vez que en promover sus intereses y derechos, desde lo micro hasta lo macro, desde los problemas y retos en empresas o los planes de desarrollo locales hasta cómo les afectan las decisiones de los PGE.
