Continúa la tragedia contra nuestros mayores en las residencias. Es necesario un mayor control y un incremento de la financiación pública en los centros que realizan un servicio público imprescindible para la sociedad.
La mitad de las muertes por Covid en España se han producido en residencias de mayores. Concretamente, han fallecido en ellas más de 26.500 personas con el virus o con síntomas compatibles con la enfermedad. Un 8% del total de sus residentes han sido víctimas mortales por Covid. En algunas comunidades autónomas los datos todavía son más estremecedores: En Castilla-La Macha y Castilla y León de cada 10 víctimas mortales por el virus 7 han tenido lugar en estos centros para personas de la tercera edad.
Desde el inicio de la primera ola las residencias de mayores han estado en el primer frente de contagios, como dramáticamente vimos. Ahora, los nuevos brotes de Covid colocan a estos geriátricos otra vez en una tesitura dramática, ya que de todos los nuevos focos de contagios las residencias registran el mayor número de casos. Además, los centros golpeados por el virus en este momento son aquellos que no estuvieron afectadas anteriormente.
Es un servicio esencial
Esto nos debe hacer pensar en la importancia de los servicios públicos, ahora y siempre. Desde nuestra organización reivindicamos unas condiciones laborales dignas para las trabajadoras de este sector e incrementar las medidas de seguridad para este colectivo. Del mismo modo, pedimos que haya un mayor control de las administraciones públicas en todas las residencias, a través de una auditoría externa que examine profundamente su actuación, y aumente la financiación pública en los centros que estén sostenidos por el Estado, ya que, como hemos comprobado, son imprescindibles para la sociedad y deben consolidarse como un pilar social esencial del Estado de bienestar de nuestro país.
Fotografía: Residencia Las Praderas en Pozuelo, en Alarcón.