Hace un tiempo que venimos viviendo en nuestro país un proceso de limitación de libertades, concretamente desde que hace unos años se aprobó la Ley Mordaza. Por supuesto, en todo este tiempo, se ha visto muy afectada la libertad de expresión que, en el siglo XXI, todos consideramos no discutida.
En las últimas semanas, con más fuerza que nunca, hemos podido observar manifestaciones cuestionando la imparcialidad de la prensa, pasando por grupos de extrema derecha que, aunque el ministro se encargó de decir que crecen menos que los grupos de extrema izquierda, se hacen notar con creciente violencia. Incluso, sorprendidos, hemos observado como un grupo de agentes de la policía municipal de Madrid que en ningún caso representan a la Policía, a través de un chat de Whatsapp vertían mensajes de odio hacía la alcaldesa de Madrid y hacia periodistas conocidos de nuestro país. Todo ello me preocupa.
UGT siempre ha estado, está y estará por la libertad, y el elemento fundamental de la libertad es la libertad de expresión. A su vez, siempre hemos defendido a los trabajadores que ejercen la función de periodistas. Una libertad que va desde el posicionamiento político, pasando por la explicación de juicios por violación y siguiendo, por supuesto, por la denuncia de corrupción donde algunos medios han tenido un papel muy distinguido. El ciudadano merece saber que sucede, así como conocer las distintas opiniones, sin prohibiciones, sin falta de libertad.
Pero más allá de la impunidad con que mucha gente, a través de los seudónimos, a través de las redes, por medio de los mensajes, etc, se cree con potestad de amenazar, insultar o coaccionar, hoy es necesario apoyar públicamente a todos aquellos que utilizando el derecho a informar con objetividad lo hacen día sí y día también. Sin miedo, sabiendo de sus obligaciones.
Y desde aquí quiero transmitir mi apoyo a todas y cada una de las personas que informan con objetividad, de acuerdo con su conciencia y sus principios, a los periodistas que intentan explicar la información y, especialmente, a los periodistas de La Sexta que, constantemente, están siendo objeto de persecución. Mi apoyo a todos ellos y, en especial, a Ana Pastor y Antonio García Ferreras, víctimas de insultos y amenazas constantes durante los últimos días.
UGT defenderá siempre la libertad de expresión.
